El segmento de los vehículos híbridos y eléctricos cada vez va cogiendo más y más fuerza. No hay ninguna duda que las marcas están destinando buena parte de sus recursos en la investigación y fabricación de nuevos modelos “verdes” cada vez más ahorradores y con menores emisiones. Es lo que demanda el público, y lo que nos pide el planeta…
el Ioniq estará disponible con tres variantes mecánicas: híbrido, eléctrico puro e híbrido enchufable, que llegará en unos meses a los concesionarios.

Un diseño trabajado en el túnel del viento
La estética del Ioniq no pasa desapercibida. Se trata de un coche vistoso que resulta moderno circulando entre el tráfico pero que no cae en la trampa de decantarse por una estética demasiado futurista. El Ioniq ha gustado estéticamente hablando entre la gente, y la mayoría coincide en que el coche es mucho más bonito en persona que en fotografías.
El frontal del coche es todo un acierto, con una enorme parrilla que le añade bastante personalidad.

Acompañan al diseño frontal unas entradas laterales que ayudan a canalizar el flujo de aire, donde además podemos ver la luz de circulación diurna compuesta por varios LED verticales. Es curioso porque cuando se circula con las luces apagadas estos LEDs van encendidos, pero cuando se activan las luces se apagan y se ilumina el marco que envuelve los faros.Visto de costado se aprecia una carrocería redondeada y una línea de cintura bastante alta con proyección ascendente hacia atrás. También pueden observarse las llantas de 17 pulgadas de baja resistencia que monta la unidad como parte del equipamiento Style, el más alto de gama.

Según Hyundai, la estética del Ioniq ha estado condicionada gran parte a los datos obtenidos en el túnel del viento, donde se ha pasado un buen puñado de horas. El trabajo de los ingenieros ha dado sus frutos ya que, según su ficha técnica, obtiene un coeficiente aerodinámica de sólo 0,24, que está realmente muy bien.La aerodinámica es un aspecto fundamental a la hora de desarrollar un vehículo ecológico. Contra menos resistencia al viento presente menor será la fuerza necesaria para mover el vehículo. Y precisamente eso es lo que busca un coche de carácter ecológico, gastar y emitir la menor gasolina y los menores gases posibles.
Sorprende su interior
Cuando se accede al interior llama la atención la buena habitabilidad que presentan las plazas delanteras. El espacio es generoso para todo tipo de estaturas. La regulación eléctrica de esta versión permite bajar mucho la banqueta de los asientos para acomodar a las personas más altas. Además, el volante cuenta con una generosa regulación tanto en altura como en profundidad, por lo que es realmente fácil encontrar la postura de conducción idónea para cada conductor.

El Ioniq es un coche en el que uno se siente a gusto rápidamente. No es un coche lujoso y no pretende serlo, pero el nivel de los acabados, los ajustes y los materiales que se han utilizado para la confección del habitáculo están claramente por encima del resto.Los acabados del salpicadero y de las puertas tienen un poco de mullido que mejora el tacto, los botones, pulsadores y tiradores de las puertas tienen un acabado más que correcto y los asientos son muy ergonómicos. Además, en este nivel de acabado, vienen forrados en cuero.
La distribución de los botones situados en la consola central es buena y de fácil gestión. Los botones de acceso rápido a las diferentes funciones del sistema multimedia están claramente diferenciadas de las del climatizador, por ejemplo. Y ya que hablamos del sistema de infoentretenimiento hay que destacar la pantalla táctil de 7 pulgadas situada en una posición correcta y de fácil manejo. Tiene radio, navegación, bluetooth, música en streaming de nuestro teléfono y algunas informaciones relacionadas con el sistema híbrido en tiempo real. Con el acabado Style además se incluye de serie el cargador por inducción para el teléfono.

El maletero tiene una capacidad de 422 litros desde el piso hasta la bandeja. Pero, si no elegimos la opción de montar una rueda de repuesto y optamos por el kit antipinchazo, las posibilidades se amplían hasta unos más que interesantes 550 litros contando el espacio resultante debajo del suelo del maletero. Además, siempre podemos abatir los respaldos traseros para ganar un volumen total de 1.500 litros.
Su sistema híbrido
Cuando hablamos de automóviles híbridos solemos asociar su funcionamiento ecológico a la conducción en ciudad. Hasta la fecha, la gran mayoría de estos vehículos presentaban una importante ventaja en cuanto a consumo y emisiones respecto a un vehículo no-híbrido sobre todo al circular a baja velocidad y por las ciudades. Los semáforos en rojo, el tráfico y un montón de factores hacen que en las urbes debamos parar y arrancar el coche un montón de veces, y de esto precisamente es lo que hace incrementar generosamente el consumo.

Los híbridos tienen la ventaja que pueden comenzar la marcha en modo eléctrico y, por lo tanto, ese momento de máximo esfuerzo no afecta al consumo de carburante. En cambio, al circular por vías rápidas muchos de ellos apenas utilizan el motor eléctrico y confían toda la potencia al motor térmico, por lo que acaban gastando igual o más (son más pesados) que un vehículo convencional.El Ioniq Hybrid es un híbrido que combina un motor de gasolina de 1.6 litros GDI de 105 CV de potencia con un motor eléctrico que ofrece el equivalente a 44 CV y que se alimenta de una batería de iones de litio. Cuando ambos trabajan a la par, la potencia máxima que se consigue es de 141 CV.
Si echamos un vistazo a su ficha técnica la marca coreana declara una aceleración de 0 a 100 km/h en 10,8 segundos y una velocidad máxima de 185 km/h, todo ello con un consumo combinado de 3,9 l./100 km y unas emisiones de CO2 de 92 g/km.

Una de las ventajas del Ioniq es que si sabes gestionar bien el acelerador puedes superar los 100 km/h de velocidad sin hacer uso del motor de combustión, y en los momentos de baja demanda de potencia el coche utiliza el motor eléctrico como propulsor y el térmico cómo generador para ir recargando la batería.
Un híbrido para la carretera

«En lo referente al comportamiento dinámico, debo reconocer que el Ioniq me ha sorprendido muchísimo. Sinceramente, no esperaba encontrarme con una dinámica de conducción tan refinada y depurada.» Es un coche muy silencioso y confortable que invita a realizar una conducción tranquila y relajada. Y no es porque el Ioniq no tenga potencia suficiente, no, cuando es necesario sólo hace falta pisar a fondo el acelerador para sacar a relucir esos 141 CV de potencia, lo digo porque es tan agradable circular sin forzar el motor que cuesta romper esa sensación de paz y bienestar.
Las baterías del Ioniq están situadas en la parte baja del chasis, justo debajo de los asientos traseros. De esta forma se logra mejorar el reparto de pesos, bajar en el centro de gravedad y no interferir en la capacidad del maletero. Otra de las ventajas de situar las baterías en esta posición es que los ingenieros han podido montar una suspensión multibrazo en el eje trasero, que mejora el confort de marcha y resulta más estable cuando se quiere practicar una conducción un poco más dinámica.

«En vías rápidas es muy cómodo, y además gasta menos que en ciudad. Creo que es de los pocos híbridos que mejoran su eficiencia en vías rápidas respecto a la conducción urbana. Como ya os he comentado antes, puede superar los 100 km/h en modo eléctrico, y hasta en alguna ocasión he llegado a ver mediante el gráfico del sistema híbrido que a 120km/h también apaga el motor térmico cuando el eléctrico se basta por si solo para aguantar la velocidad.Otra de las sorpresas que me he llevado del Ioniq ha sido la excelente puesta a punto de la dirección. Es mucho más precisa y directa de lo que cabría esperar y eso se nota, y mucho, cuando se circula por vías secundarias o puertos de montaña. El Ioniq va por donde le marcas y no realiza extraños. Hace gala de tener uno de los mejores chasis de entre los híbridos con características similares, con una estabilidad y un paso por curva muy similar al de una berlina convencional.
Lo mejor de todo me lo he guardado para el final. El Ioniq Hybrid se conduce exactamente igual a un coche convencional. Tiene un buen sistema híbrido, es potente, es confortable, es silencioso y su chasis es realmente bueno, y todo ello se combina con una transmisión automática de doble embrague que deja literalmente en ridículo a los odiosos CVT que tan poco me gustan y que montan la gran mayoría de híbridos.»

Precio y equipamiento
Hablemos ahora de números y equipamiento. El Hyundai Ioniq Hybrid se ofrece con tres niveles de acabado: Klass, Tecno y Style, con un precio de partida en su versión base de 23.900 euros.
La unidad que os hemos enseñado es una Style, la más completa, que arranca en 29.900 euros.

Así pues, éste Ioniq, que ofrece entre su equipamiento de serie elementos como los asientos eléctricos, los faros de xenón, las llantas de 17 pulgadas, el sistema multimedia con navegación y pantalla de 7 pulgadas o los sensores de aparcamiento delantero y trasero con cámara de marcha atrás, cuesta 30.350 euros.El resto de equipamiento lo comprenden varios airbags para conductor, acompañante, de cortina y laterales delanteros, alerta de aproximación de tráfico trasero, calefacción y refrigeración para los asientos, volante calefactable, Bluetooth, cargador inalámbrico para el móvil, climatizador bizona, conexiones USB y AUX, ayuda al arranque en pendiente, control de crucero con limitador de velocidad, 6 altavoces, retrovisor interior con oscurecimiento, kit antipinchazos, llave inteligente con botón de arranque, mandos en el volante, parrilla cromada, pedales deportivos de aluminio, sensor de lluvia, sistema de alerta de cambio de carril involuntario, sistema de aviso de colisión frontal, detector de ángulos muertos en el retrovisor, frenada autónoma de emergencia AEB, techo solar practicable, toma de corriente auxiliar y cuero para el volante y el pomo, entre muchos otros.
Para terminar debéis saber que actualmente la marca ofrece varios descuentos. Nos ahorraremos 1.800 euros en la compra debido a la promoción del mes, otros 800 euros si entregamos nuestro viejo Hyundai, y nos ofrecen dos opciones de financiación con descuentos de 1.400 o 1.700 euros dependiendo del que elijamos. Así pues, nos podemos llevar un Ioniq tope de gama, con 5 años de garantía sin límite de kilómetros, por menos de 26.000 euros.
Opinión del experto
Nos ha gustado
- Comportamiento dinámico
- Nivel de acabados bastante bueno
- Cambio de doble embrague
- Se percibe un coche potente
FUENTE: Coches.net